10/11/23
ANTES QUE SEA TARDE
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: «Se parecerá el reino de
los cielos a diez doncellas que tomaron sus lámparas y salieron a esperar al
esposo. Cinco de ellas eran necias y cinco eran sensatas. Las necias, al tomar las
lámparas, se dejaron el aceite; en cambio, las sensatas se llevaron alcuzas de
aceite con las lámparas. El esposo tardaba, les entró sueño a todas y se
durmieron. A medianoche se oyó una voz: «¡Que llega el esposo, salid a recibirlo!»
Entonces se despertaron todas aquellas doncellas y se pusieron a preparar sus
lámparas. Y las necias dijeron a las sensatas: «Dadnos un poco de vuestro aceite,
que se nos apagan las lámparas.» Pero las sensatas contestaron: «Por si acaso no
hay bastante para vosotras y nosotras, mejor es que vayáis a la tienda y os lo
compréis.» Mientras iban a comprarlo, llegó el esposo, y las que estaban
preparadas entraron con él al banquete de bodas, y se cerró la puerta. Más tarde
llegaron también las otras doncellas, diciendo: «Señor, señor, ábrenos.» Pero él
respondió: «Os lo aseguro: no os conozco.» Por tanto, velad, porque no sabéis el
día ni la hora.» Mt 25,1-13