
30/04/25

Después de leer la enseñanza del vídeo,
coloca tu cuerpo en la posición adecuada y cierra los ojos.
Conecta con tu respiración.
Coloca tus manos sobre el abdomen.
Imagina tu interior, ese lugar en el que está tu centro.
Siéntelo.
Siente en él la respiración. Imagina que en ese lugar está tu luz.
Con cada respiración tu luz se va expandiendo por tu cuerpo.
Tu luz sigue expandiéndose hasta que sale de tu cuerpo e ilumina tu alrededor.
Imagina tu luz, imagina las luces de las personas
que están cerca de ti.
Todas vuestras luces se unen formando una sola,
muy brillante y que va más allá de esta sala.
Da gracias por la luz, por tu luz, por su luz, por nuestra luz.
Conecta con tu respiración y abre suavemente los ojos.