Una instrucción bien comprendida
En su primer Plan de Estudios, Sofía Barat dejó escrito que “la instrucción bien comprendida es, sin duda, uno de los factores más eficaces para educar”. Ya en su tiempo eso no significaba acumular contenidos, sino construir unas bases sólidas y unos hábitos intelectuales que permitieran tener conocimientos bien ordenados, pero sobre todo una capacidad para pensar de manera personal y coherente.