18/11/21
Rosa Filipina fue una mujer de corazón grande, valiente y abierto. Una mujer que vivió con los ojos fijos en Jesús, con la mirada puesta en Él. Le pedimos a Jesús, hoy que celebramos su fiesta, que nos haga personas creyentes como ella lo fue.
Fijos los ojos en Jesús quiero vivir,
con la mirada puesta en Él
quiero buscar la paz que nos devuelva la humanidad
que nos cure las heridas sin cerrar.
Fijos los ojos en Jesús
en la bondad que desborda todo su ser,
arraigando el corazón en la roca firme de su Amor
para que el odio nunca tenga la razón.
Fijos los ojos en Jesús
quiero seguirle a donde vaya sin temer,
como el ave que se guía por el calor que le da vida
para engendrar más y más vida cada día.
Salomé Arricibita